Desde hace dos años, el parque San Pío recibe el campo en la ciudad

Desde el 15 de octubre de 2017, las mañanas de domingo en el parque San Pío se han convertido en un espacio de integración entre la comunidad urbana y rural de Bucaramanga.

Esto gracias al Mercadillo Campesino, en el que alrededor de 65 agricultores de las zonas rurales de la ‘Ciudad Bonita’ ofrecen sus frutas, verduras y productos terminados a los residentes del sector de Cabecera.

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Una iniciativa, que según la Alcaldía, quiere ofrecerle a los campesinos la opción de vender sus productos directamente al consumidor sin intermediarios.

“La idea inicial surge a raiz de la experiencia del ex alcalde Rodolfo Hernández, quien se dio cuenta que estos espacios existen en otras ciudades del mundo como un espacio de acercamiento entre el campesino y la gente de la ciudad. Entonces fue una forma de visibilizar a la comunidad rural que en nuestra ciudad abarca el 70% de la población”, señaló Rigoberto Abello Soto, coordinador de los Mercadillos Campesinos de la Alcaldía de Bucaramanga.

Este espacio, que ya cumplió más de dos años, es para Socorro Gualdrón, habitante de la vereda Capilla Alta ubicada en la vía a Matanza, una oportunidad de mejorar las opciones de comercialización de las frutas y verduras que cultiva en su finca, llegando directamente al consumidor.

“Ha sido muy bueno porque ya somos nosotros mismos los que vendemos los productos a la gente a un precio que nos favorece a todos. Además nos damos cuenta que la gente le gusta mucho y nos compran fielmente”, señaló Gualdrón.

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Y es que la afluencia de las personas demuestra la gran acogida que este espacio tiene en la comunidad, quienes a cada fin de semana acuden con su canasto a conseguir los productos más frescos de toda la ciudad.

“Como veterinaria me parece una oportunidad muy buena para las personas de la zona rural, porque considero que la base de toda sociedad es el campo, sin ellos la ciudad no sería nada. Además me siento muy bien comprando acá porque la gente es muy amable y respetuosa. Por eso consideraría que el gobierno debería apoyarlos más”, manifestó María Fernanda Gómez, habitante de Cabecera.

Las críticas

Aunque muchas personas respaldan la idea, existen algunos detractores de esta iniciativa por algunas razones.

Una de ella es la “mala imagen” que las basuras sobrantes del mercadillo causan en el parque, así como la suciedad que se refleja en el piso.

“Creo que un parque emblemático como el San Pío no debería ser usado para este tipo de actividades. Vemos como las canecas quedan rebosadas de basura y los pisos también quedan sucios. Considero que existen otros espacios que podrían ser utilizados para eso”, comentó Esperanza Reyes, miembro del Junta de Acción Comunal de Cabecera.

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Ante ese comentario, Rigoberto Abello reconoce que son muchos aspectos los que la iniciativa debe mejorar, pero aseguró que trabajan de diferentes maneras por atender esas sugerencias.

“Siempre hemos tenido críticas y se han recibido de la mejor manera. En esta caso particular, podemos decir que existe una cuadrilla que hace aseo antes y después del mercadillo. Además, tan pronto como pasa el mercadillo la Emab recoge la basura de las cestas. También hemos hecho capacitaciones sobre el manejo de los residuos con los campesinos y estamos trabajando en un proyecto para crear abono con los desechos verdes, que incluso se podría comercializar; uno de los campesinos los recoge y se los lleva para su finca”, explicó Abello.

Otras personas han manifestado que no todas las personas son campesinas y que incluso esta iniciativa afecta las ventas de las plazas de mercado.

“La gente que está ahí son campesinos, que nosotros mismos hemos verificado. Que algunos tienen puestos en plazas de mercado, es verdad, es imposible pensar que comercialicen sus cosechas tan solo un día a la semana. Del grupo existen algunos artesanos que no todos son del campo, pero a los que debemos abrirles un espacio también. Y lo de las ventas es algo irracional, la gente de las plazas tiene toda la semana para vender, mientras que esta iniciativa sólo se hace un día a la semana”, expresó el Coordinador del Mercadillo.

Abello agregó que con el fin de mantener el orden se hacen veedurías permanentes para que las personas cumplan con las normas que se establecieron desde el principio.

“Verificamos continuamente que las personas usen su camiseta, delantal y mantenga el orden y que comercialicen los productos que declararon en el contrato, por nombrar algunos aspectos. Además, logramos con Tránsito ubicar un agente que controla el tráfico. Todo esto para mantener el orden”, puntualizó el Coordinador del Mercadillo.

La Alcaldía y los agricultores del Mercadillo de San Pío invitan a la comunidad a celebrar el cumpleaños de Bucaramanga el próximo domingo 22 de diciembre con una chocolatada elaborada con productos campesinos propios, durante las horas en las que habitualmente se realiza esta actividad.

¿Continuará el Mercadillo?

Gracias al Acuerdo 025 del 2019 del Concejo de Bucaramanga, el mercadillo campesino deberá mantenerse independientemente de la administración de turno.

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Es por eso que desde ya se trabajan en algunas recomendaciones para que el gobierno de Juan Carlos Cárdenas mejore aún más este espacio.

“Desde las labores de empalme estamos dando a conocer las sugerencias para que se potencialice este espacio. Una de ellas es poder brindar capacitaciones en temas industriales para que el campesino no solo ofrezca productos primarios sino que además pueda procesar sus frutas y convertirlos en productos derivados. La idea es seguir apostándole al campo, que era una de las poblaciones más olvidadas”, aseguró Abello.