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Portada, ¿Qué pasa?

Recoger los excrementos de las mascotas, un deber de los dueños

Las autoridades hicieron un llamado a la comunidad para que evidencie este tipo de hechos y denuncie ante el CAI más cercano, con el fin de aplicar los correctivos pertinentes. – Archivo/GENTE DE CABECERA

Redacción Gente de Cabecera

Las denuncias de los residentes del barrio Conucos de Bucaramanga sobre la falta de conciencia de algunos de sus vecinos sobre el mal manejo que le dan a las heces de sus mascotas, son cada vez más constantes.

Carmen Sofía Hernández, habitante del sector, asegura que el área más afectada es el parque de Conucos, ubicado justo en frente de la Parroquia Divino Niño.

“Varios propietarios de la zona sacan a sus perros, en su mayoría de gran tamaño, a pasear por el parque a diferentes horas del día, sin tomarse la molestia de recoger sus excrementos”, agregó Hernández.

Ante esta situación, la comunidad hace un llamado a las autoridades competentes para que regulen estos casos que afectan el buen uso del espacio público e incluso la salud de los vecinos y visitantes del parque.

“Es triste ver que este tipo de situaciones ocurran en un lugar que es frecuentado por niños, personas de la tercera edad y pacientes del complejo médico del sector. Es importante que la Policía haga el respectivo control de dicha situación”, señaló Lucio Ramírez, residente del Conjunto Santa Isabel.

Deberes de tener una mascota

Tener una mascota en este país es un derecho. Sin embargo, también implica una serie de deberes y compromisos con la comunidad.

“Tener una mascota trae responsabilidades como la disciplina de sacarla a pasear, así como también la responsabilidad de recoger sus heces en el camino y por ende botarlas en la caneca de basura de nuestros hogares, pues a diferencia de Bogotá y otras ciudades, Santander no posee muchas canecas ni servicios de aseo encargados de recoger este tipo de desechos”, comentó la médico veterinaria Andrea Acosta.

Acosta agregó que algunos propietarios de mascotas están eludiendo la responsabilidad de botar la materia fecal de sus mascotas en su propia casa, así como recogerla.

“Esto se debe a que estamos viendo muy seguido debajo de los árboles bolsas plásticas con su materia fecal adentro, lo cual causa muchas molestias a los vecinos”.

Además, explicó que este tipo de hechos corresponde a una falta de “cultura ciudadana” de cuidado y respeto por el espacio público y su comunidad.

¿Quién controla este tipo de faltas?

La Policía Nacional es la entidad responsable de imponer las respectivas sanciones a quienes incurran en faltas que ponen en riesgo la convivencia por la tenencia de animales. Así lo determina el artículo 124, numeral tres, del Código Nacional de Policía y Convivencia.

Por lo tanto, aquella persona que omita la recogida de los excrementos de su mascota o los deje abandonados después de recogidos en el espacio público o en áreas comunes, podría ser sancionado con una multa correspondiente a cuatro salarios mínimos diarios legales vigentes, es decir alrededor de 100 mil pesos.

Por eso, si usted ve a alguien hacerlo o lo conoce, está en libertad de llamar a la policía y denunciarlo.

Para el caso del sector de Conucos, el CAI más cercano es el de La Victoria, al cual se pueden comunicar en el número telefónico 6479489 o directamente con el cuadrante asignado al barrio Conucos, al número celular 3013461840.

“La persona que se percate de este tipo de acciones puede denunciar ante la Policía. Además, debe servir de testigo para proceder a aplicar la sanción”, explicó el patrullero Elkin Fajardo del CAI de La Victoria.

Asimismo el patrullero Fajardo reconoció que en el sector se realizan monitoreos constantes que permiten ejercer el control sobre este tipo de irregularidades.

“Cuando nuestros efectivos se percatan de este tipo de hechos proceden en primer lugar con un llamado de atención, si el ciudadano desacata la orden se procede a aplicar el respectivo comparendo”, puntulizó.

En cifras

105

mil pesos es el valor apróximado de la multa para quien no recoja los excrementos de sus mascotas, o los recoja y los deje abandonados en zonas públicas.