Intervenciones inteligentes
Paola Bernal León / Editora Gente de Cabecera
¿Recuerda el foro de creatividad que se realizó un año atrás para que repensáramos la ciudad entre todos y pusiéramos varias ideas sobre la mesa? Me gustan ese tipo de ejercicios en torno al urbanismo pues nos animan a soñar, pero también a trabajar por una mejor ciudad. Por eso me encanta compartirles tantas ideas alrededor de la arquitectura urbana y el trabajo que realizan en diversas partes del mundo.
Leyendo sobre urbanismo me encontré con una gran iniciativa que se ejecutó en la comuna 13 de Medellín en 2015. El objetivo, darle vida a espacios muertos de algunos sectores, para que de manera armoniosa transformaran zonas que anteriormente estaban olvidadas por la comunidad; lugares que anteriormente eran nicho de delincuencia, pero que empezaron a tomar un nuevo aire y desencadenaron acciones positivas para la convivencia.
Por ejemplo, una arquitecta adaptó una calle empinada en un tobogán o resbaladero. Para muchos, lo que a simple vista podría ser una pérdida de tiempo, llamó la atención no solo de los periodistas de CNN sino de niños y padres de familia; así, la calle se iluminó, se activó el comercio y hubo orden y aseo en el lugar.
Pequeñas intervenciones como estas se convierten en puentes a la transformación, y qué mejor propuesta para llegar a esos niños que serán las futuras generaciones, brindándoles herramientas para que generen lazos más cercanos con su hábitat, lejos de las esquinas oscuras que invitan al consumo de sustancias psicoactivas.
Los urbanistas tienen claro que detrás de algo ordinario se puede lograr algo extraordinario; la clave, articular los procesos con inteligencia.