Semillas de civismo
Paola Bernal León / Editora Gente de Cabecera
Mi mensaje de hoy va para los docentes. Inmersa en lecturas sobre civismo me encontré con una propuesta interesante que le apuesta a la formación y sentido de pertenencia por la ciudad, desde las aulas. Los métodos para hacer que los jóvenes sientan su ciudad como propia, la amen y la respeten, están ligados a proyectos que desde el colegio les despierten el amor por el voluntariado.
Desde la siembra de un árbol hasta un trabajo adicional que vincule a su comunidad más cercana crea en las nuevas generaciones un deseo innato por trabajar por su ciudad.
No importa que al graduarse quieran expandir sus horizontes, establecerse en otras ciudades o países. Lo interesante del proceso formativo es que el joven entenderá que antes de irse de su ciudad, a la que ama y con la cual se siente conectado por sus raíces, debe entregarle un aporte significativo que la haga evolucionar, prosperar y ante todo embellecer.
Por eso, hoy abro la invitación a los docentes, con el fin de que siembren en sus alumnos ese espíritu cívico.
Estamos en un momento coyuntural en el que la ciudad se prepara para poner en cintura a quienes afecten el orden con el Nuevo Código de Policía, pero es claro que una persona educada y formada en valores personales no necesitará de este documento para cumplir con su papel de ciudadano.
Interactuar con la gente, respetar la tierra natal, emocionarse por el mejoramiento de la ciudad, despertar la solidaridad, aceptar la diversidad, sentirse orgulloso del lugar en el que nació, estimular el interés por la realidad nacional y usar la tecnología de manera positiva son parte de la tarea.