Encendamos la esperanza
Paola Bernal León / Editora Gente de Cabecera
Se encendieron las luces de diciembre y con ellas el espíritu propio que trae impregnado este mes. La invitación que hoy quiero hacerle a todas las familias de nuestros sectores es a recuperar esas bonitas tradiciones que marcaron a nuestros abuelos y padres. Para muchos era el momento ideal para ir a buscar un árbol, y decorarlo con algodón y moños rojos y verdes. Era todo un acontecimiento verlo finalizado y poner la estrella en la punta más alta.
Diciembre también era la oportunidad perfecta para guardar cantidad de muebles que de enero a noviembre decoraban la sala, pintar la fachada, paredes interiores y elegir ese gran espacio de la casa para elaborar el gran pesebre, que no escatimaba en detalles.
Por supuesto era toda una tradición que los niños escribiéramos la carta a Papá Noel, con la lista de regalos que llegarían por arte de magia a medianoche.
Esos recuerdos de infancia, que siguen vivos en nuestros padres y abuelos, no deben perderse. Que este mes sea la mejor excusa para reunirse en familia y despertar ese niño interior que tanto amaba la Navidad. Haga el Nacimiento, y si es creyente, pida con devoción por la unión familiar.
No importa que haya tenido un año pesado o triste, quizás, este mes sea la oportunidad para darle luz. Diciembre es especial justo por eso, porque rompe con la rutina de los otros 11 meses. Entonces, por qué dejar apagar la esperanza.
Que sea una buena oportunidad también para donar a quienes no tienen, tal y como lo hacen las fundaciones que trabajan por llevar sonrisas a los niños y enfermos. Sea usted también un integrante más de estas nobles campañas.