Otro árbol mutilado
Un miembro de la JAC denuncia que aunque fue autorizada por la Cdmb solo una poda del 30%, ésta no se cumplió. – Suministrada / GENTE DE CABECERA
Orlando Beltrán Quesada / Periodista del Barrio
Resulta incalificable la forma como mucha gente actúa en pleno rigor climático, donde las asfixiantes temperaturas y la evidente crisis del agua son duros campanazos de alerta sobre la absurda conducta del homo sapiens, al atropellar todas las formas de vida y avanzar raudamente hacia el punto de no retorno.
Todo árbol cumple una función ecosistémica vital para el entorno silvestre y también el citadino, contribuyendo a refrescar el aire, a capturar el exceso de carbono que calienta el planeta, a detener la erosión, a proporcionar vivienda y comida para aves y otras especies animales… y lo más importante, a alegrar la vista y el espíritu de humanos conscientes de su valor paisajístico en estas selvas cada vez más grises que llamamos ciudades.
Hace unos días, en la carrera 39A con calle 42 fue macheteado y aserrado de manera inmisericorde un espécimen de gallinero (Pithecellobium dulce) amparándose en un permiso de la Cdmb, Corporación Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, que de acuerdo con quien contrató los acuciosos macheteros, permitía la poda de solo un 30% de su escaso follaje.
La Policía Ambiental levantó acta basados en nuestra denuncia, sustentada por el dictamen del especialista forestal del Área Metropolitana de Bucaramanga, AMB (actual autoridad ambiental de los cascos urbanos de los cuatro municipios del área metropolitana), que se hizo presente para constatar una destrucción de más del 65% de sus ramas y hojas.
Ahora vendrán las sanciones, porque no es justo que se violen flagrantemente las normas que protegen los árboles que el Decreto 1791 de 1996 llama aislados, pero que no por eso están lejos de los ojos vigilantes de la comunidad organizada.
La Junta de Acción Comunal de Cabecera del Llano se dispone a desarrollar una serie de programas de educación ciudadana para empoderar la defensa de lo poco verde que nos queda en esta otrora ciudad de los parques.
Definitivamente nos falta mucha conciencia ambiental y nos sobra desfachatez.
Nota de la Redacción
De acuerdo con Alexander Aguilar, Subintendente de la Policía Ambiental del Área Metropolitana de Bucaramanga, “las sanciones las define la autoridad ambiental (AMB o Cdmb), a través de un proceso que se le debe iniciar a la persona que recibió el permiso de poda, previa la denuncia ciudadana que se debe hacer ante esas corporaciones”.