Mucho más que una flor
Paola Bernal / Editora Gente de Cabecera ([email protected])
Traigo a colación a la periodista creadora del mejor corto documental en los premios Óscar de la Academia, Sharmeen Obaid Chinoy, quien con su trabajo titulado ‘A girl in the river’ logró que el estado pakistaní se sentara a revisar los vacíos jurídicos que no respaldan la integridad femenina. Gran admiración se lleva esta mujer quien denuncia que cerca de mil personas son asesinadas en este país al año por castigos de honor. Las razones por las cuales pierden el “honor” ante su comunidad son increíbles: porque fueron violadas o porque rechazaron una propuesta amorosa de sus padres, causal para golpearlas y hasta asesinarlas.
El documental narra la historia de Saba, quien fue golpeada por su padre, por casarse con un hombre que él no aprobaba. Además de recibir un tiro en su rostro fue arrojada en una bolsa a un río. Saba sobrevivió y los culpables están libres, pues en el caso de que la familia los perdone, los agresores son liberados. Así lo respalda la ley.
Y las cifras aterran: Al menos cada 90 minutos se produce un acto agresivo como estos en el mundo.
Qué decir del caso más reciente, dos jóvenes que decidieron viajar solas y fueron asesinadas en Ecuador. Bajo el hashtag #niunamenos nos unimos a este sentir que sigue dejándonos aterradas, pero que nos da el impulso para seguir defendiendo nuestro género.
Seamos capaces de sostener nuestros puntos de vista, de alejar de nuestras emociones personas que no son capaces de darle el lugar a una mujer, reeduquemos a las familias, a los hijos varones, a las niñas, a los estudiantes, a las suegras con discursos patriarcales, a nuestras amigas con vidas emocionales caóticas.
La tarea es constante y va más allá de una flor en el día de la mujer, pues son muchas las flores que se llevan a un velorio por el asesinato de una mujer.