Formando a taxistas en historia de la ciudad

Imagine la siguiente escena: usted toma un taxi y en su trayecto no solo se deja sorprender por la amabilidad del conductor sino por sus conocimientos en Historia.

El afable conductor empieza a narrarle quién era Andrés Páez De Sotomayor, cómo se fundó Bucaramanga, o la historia de don David Puyana, qué lotes poblaban lo que hoy es Cabecera, entre otros datos.

Este es el objetivo de Óscar Castro, abogado y líder del parque automotor, quien ha convocado a cerca de 300 taxistas para que reciban talleres de historia de la ciudad, atención al público y valores.

De esta forma se le da un valor agregado a los usuarios de taxis, se mejora la imagen del gremio y se trabaja en identidad ciudadana, cuyo propósito es hacer sentir a Bucaramanga y su área metropolitana “nuestra” y cuidarla.

“Aprovechando los días en los que los taxistas tengan Pico y Placa estaremos convocando a sus conductores para que participen de las charlas que estarán a cargo de la Academia de Historia de Santander, queremos que los taxistas sean como los pilotos pero en tierra, los operarios logísticos para hablar de Bucaramanga y construir ciudad. La idea es consolidar este trabajo y con el tiempo realizar unos folletos turísticos para que el pasajero disfrute su trayecto y conozca el lugar donde vive, o el que visita en el caso de ser turista”, mencionó Castro.

Además de las temáticas en civismo habrá talleres sobre valores y ética, así como sobre inteligencia financiera, jornadas de salud y hasta clases artísticas de acordeón y guitarra para los conductores de taxi.

La iniciativa se gesta con conductores de Taxi Autos y La Unión. La meta son 7 mil taxistas.

“Es como crearles la escuela del taxista, con talleres prácticos de no más de una hora, cuyo objetivo es mejorar la identidad del conductor y lograr en menos de tres años que Santander sea líder en conductores amables y con el mejor servicio”, agregó Castro.

De esta forma concluye el líder, “se trabaja en el servicio, en que los santandereanos sientan identidad con el taxista, que conozcan todos los trámites legales que deben cumplir para poder conducir un vehículo amarillo, y se sientan seguros porque los taxistas los dejan en la puerta de su casa y no como ocurre en otras ciudades que bajan los pasajeros antes de llegar a su destino”, enfatizó Castro.

Finalizados los talleres, estos taxis se identificarán con el logo Pasión País.