Los parques de mi ciudad
Por Daniel Quintero Trujillo, Educador y Escritor
La Ciudad Bonita es una de las regiones de Colombia que tiene el privilegio de contar con verdaderos parques como escenarios de la cultura y recreación.
Sí, este es el sentido que debe tener esos espacios públicos, que hoy a nivel del urbanismo universal son utilizados para estimular el desarrollo físico y la salud mental, además de las presentaciones artísticas.
Eso sí, nunca los parques deben convertirse en zonas de consumo de drogas y bebidas embriagantes, porque estaríamos enviando a los niños y jóvenes imágenes subliminales (para que se graven en el inconsciente) de que la cultura debe estar asociada al consumo de alcohol tal como lo hacían los pueblos ancestrales.
El Inderbu (Instituto del Deporte y la Recreación de Bucaramanga), viene desarrollando en el parque de Los Leones un excelente programa de recreación con ‘Calles Vivas’ orientado por un profesor.
Allí todos los días los ciudadanos del sector de Cabecera del Llano se dan cita para participar de un sano esparcimiento, acompañados de música para optimizar así el desarrollo de la personalidad.
Estos espacios públicos deben ser como las aulas máximas de los colegios y universidades llamados paraninfos, pues en ellos se entronizan las verdaderas manifestaciones culturales.
Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, los parques además de ayudar a que respiremos aire fresco y limpio, deben convertirse en centros para las expresiones culturales y artísticas, y en espacios propicios para el esparcimiento del espíritu y el cultivo de las relaciones sociales que contribuyan a mitigar el estrés producido por el trabajo y el desarrollo de las ciudades.
Esperemos que esto se entienda, aplique y replique en los demás parques de nuestra querida Bucaramanga, reconocida por tener la mayor cantidad de parques en su perímetro comparada con otras capitales del país.