Oportunismo electoral
Por Fabio Peña, editor Gente de Cabecera ([email protected])
Ahora sí aparecieron todos los políticos santandereanos ha denunciar el cobro de la valorización y a convertirse en los protectores de la comunidad, en los defensores de sus derechos y en los adalides de la justicia social.
¿Por qué no lo hicieron hace tres años cuando se aprobó el gravamen?
Claro, entonces no había elecciones al Congreso.
Ahora salen a la plaza pública y en los medios a denunciar lo que ellos mismos acogieron con su silencio en la administración pasada. Antes, ninguno estaba en desacuerdo.
¿Por qué no hubo la misma vehemencia y pronunciamientos contundentes cuando se les cobró valorización a 28 mil predios de Cañaveral y sus alrededores para la construcción de la transversal El Bosque?
Allí la situación fue más dramática pues se cobró por una obra que no fue consultada, nadie supo cómo se hizo la irrigación, muchos la consideran ineficiente y, lo peor, no ha sido terminada pese a que la mayoría pagó hace tres años su cuota.
Sin embargo, ninguno dijo nada. Nadie se pronunció. Ni las marchas de los habitantes de esta parte del área metropolitana conmovió a los políticos; no hubo solidaridad alguna.
¿Sería tal vez porque en aquella época no había elecciones? Tal vez.
Lo cierto es que la comunidad tuvo que batallar sola y al final tuvieron que pagar.
El tema de valorización se convirtió en caballo de batalla para muchos. Y qué mejor que pedirle al presidente que ayude con dinero, lo cual seguramente sucederá porque, al fin y al cabo, también se avecinan las elecciones presidenciales.
La comunidad necesita ayudas sinceras, efectivas y sin oportunismo.
Pero de seguro llegará el momento de sacar pecho y decir que hicieron mucho por la gente.