Por eso fracasa el reciclaje…
Amelia Borda
Mucho se ha hablado acerca de este tema y definitivamente las cosas improvisadas no resultan bien.
Parece que el Alcalde, que entre otras cosas estuvo visitando España para enterarse del funcionamiento del reciclaje en uno de los países mejor organizados en este aspecto, hizo a un lado lo aprendido en su afán de disminuir el volumen de los residuos ante el cierre inminente de El Carrasco.
La intención fue muy buena y debemos copiar todo lo que otros países nos puedan aportar porque ya es hora de que comencemos a reciclar, pero las cosas se hicieron sobre la marcha sin tener en cuenta lo principal que es instruir a la gente pero no bajo amenazas de comparendos.
Se suprimió un día normal de recolección de desperdicios porque ahora hay más tardanza durante toda la semana en el recorrido de los carros. Los días miércoles y jueves los empleados tienen que escoger bolsa por bolsa para cerciorarse de que son reciclaje y dejan el resto de basura en la calle y los demás días se aumenta considerablemente el volumen de desperdicios, proliferando el desaseo en las calles y separadores, los roedores y hasta los gallinazos.
Para el almacenamiento del reciclaje consiguieron bodegas para llevar allí el material y en la primera semana casi se llenó el cupo de las instalaciones; además las personas encargadas no daban abasto con la enorme cantidad de deshechos, algunos contaminados porque los usuarios no tienen el conocimiento necesario para separar desde sus casas o por la disminución de un día de recolección, simplemente les pareció muy fácil no reciclar.
La situación no fue planeada y programada como se debía hasta que hoy se llegó al punto de que los mismos recicladores de las cooperativas asociadas están saliendo a las calles para enseñar a la gente y para protestar porque ya están trabajando a pérdida.
Debemos crear conciencia desde los niños más pequeños hasta los adultos para mejorar el medio en que vivimos y que además reciclando también colaboramos con las personas que viven del aprovechamiento de lo que para los demás es basura.