Bailoterapia es salud y felicidad
Audry Laguado M
El baile siempre ha estado en la historia de la humanidad como expresión artística y cultural.
Sin embargo ahora la danza es una terapia para combatir los malos hábitos y empezar una vida sana. En los diferentes gimnasios o academias de baile se realizan sesiones de la llamada bailoterapia, que es una forma diferente, y tal vez divertida, de ejercitarse.
La bailoterapia nació con la idea de encontrar bienestar personal y lograr así el equilibrio por medio de la danza y uno de los aspectos que más valoran quienes la practican, es que sin cargas externas, se puede mejorar no solo la calidad de vida, sino su salud.
¿Cómo se realiza?
En esta modalidad, un grupo de personas siguen las instrucciones de un líder quien poco a poco va creando una rutina al ritmo de diferentes géneros musicales: merengue, salsa, reggeaton, hip hop, entre otros.
En la primera etapa de se realiza calentamiento, al mismo tiempo el ritmo de la música va en aumento al igual que los movimientos hasta alcanzar la cima donde se mantienen por unos minutos.
Minutos más tarde el ritmo va bajando poco a poco, para que el sistema cardiovascular no se sienta recargado, hasta terminar con movimientos más suaves.
Las ventajas
“El baile se considera uno de los ejercicios más completos pues trabajan varios grupos musculares y el sistema cardiovascular y ayuda en la eliminación de líquidos y exceso de grasa.
“Además ayuda a corregir nuestras posturas, desarrollar nuestra flexibilidad, resistencia agilidad, equilibrio y concentración” aseguró Soledad Chávez, pionera en la práctica de bailoterapia en Cañaveral.
Estas jornadas deportivas y de diversión previenen o alivian enfermedades físicas y sicológicas, adicionalmente lo pueden realizar pequeños de dos años hasta adultos de más de 80 siempre y cuando no tengan problemas de movilidad.
“Los médicos y sicólogos están recomendando esta práctica para mejorar la calidad de vida y es que no importa si no sabe bailar, pues de paso pueden aprender.
“Lo recomendable es que se realice una sesión todos los días, pero si las ocupaciones diarias no lo dejan puede asistir a tres clases por semana”, agregó Soledad.
Por otra parte, los niños también pueden realizar bailoterapia, pues esto les ayuda a mejorar su capacidad de concentración, memoria, coordinación, disciplina y de paso los ayuda a ser más sociables.
Desde los dos años los pequeños pueden empezar a realizar estas rutinas que cabe aclarar los ayuda a ocupar su tiempo libre después del colegio, eliminar el sedentarismo y ayuda con una grave enfermedad como lo es la obesidad infantil.
Otros que se pueden ver beneficiados son las personas de la tercera edad que no tengan problemas de movilidad. Estas sesiones los ayudan a mantener con energía y a estirar los músculos. Para este tipo de público las rutinas son un poco más lentas pero lo bueno es que pueden gozar de los ritmos musicales que los hicieron bailar en sus años mozos.
nuevos movimientos.