Cableado subterráneo: ¿una utopía?
Que afean la imagen del sector, que son un peligro para los peatones y conductores de vehículos y que causan daños a la salud humana y del medio ambiente.
Estas son solo algunas de las quejas que a diario manifiestan residentes de la comuna 12 referente a los cables que cuelgan de los postes y que muchas veces por permitir su normal funcionamiento obliga a las empresas dueñas a podar árboles vecinos.
Aunque muchos proponen que el cableado debería ser subterráneo y que así no se sacrificaría tanto el medio ambiente, el tema financiero prima en quienes tienen la solución en las manos.
El arquitecto Gilberto Camargo Amorocho precisa que hoy en día la norma exige a los nuevos conjuntos residenciales a llevar el cableado eléctrico de manera subterránea, pero que falta más autoridad para hacer cumplir la norma.
“Se debe exigir más en este tema, no solo porque arquitectónicamente se ve feo y no se puede tomar por lo menos una foto de una fachada que quede bonita, sino porque muchos se están pasando por encima la norma que dice que debe haber mínimo entre 15 o 20 metros de distancia entre un cable de alta tensión y una vivienda. Estos cables cerca del cuerpo humano lo afectan y esto está comprobado”, dijo el profesional.
Igualmente advierte la importancia de que la Corporación para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, CDMB capacite a las personas que las empresas envían a podar los árboles para darle vía libre a los cables, ya sean de energía, televisión o internet y telefonía.
“La mayoría de obreros no ha recibido capacitación de biólogo de cómo se debe cortar un árbol para evitar que cuando crezca se pudra. Es importante saber que en la poda el tronco debe quedar mirando hacia abajo y no hacia arriba, como muchos la dejan, pues cuando llueve este núcleo de la rama se empoza, se llena de hongos y se pudre rápido, llevándose así al resto de árbol. Estas son normas de biólogos, es una técnica que por obligación se debe aplicar”.
Así mismo instó a las empresas públicas y privadas a unir esfuerzos y buscar darle a Bucaramanga un panorama más limpio, libre de cables “al estilo de otras ciudades del mundo, incluso de algunos sitios de Medellín y Cali donde ya se empezó a poner el cableado de manera subterránea”.
Es muy costoso
Al respecto, Ricardo Ribero, jefe del área de distribución de energía de la Electrificadora de Santander, ESSA aclaró que esta empresa no es la única que hace podas en la ciudad.
“También lo hacen la Alcaldía, las empresas de televisión por cable, de teléfono… y cabe aclarar que lo que hacemos son podas y no talas como mucha gente lo dice, la única entidad encargada de autorizar talas es la CDMB”.
Sobre la posibilidad de que Bucaramanga algún día tenga el cableado subterráneo el funcionario explicó que financieramente no es viable, pues es un proyecto muy costoso que por ahora está condicionado por el Plan de Ordenamiento Territorial.
“No se puede hacer roturas donde a uno se le ocurra, todo tiene un trámite. Además la infraestructura es muy costosa y tendríamos que tener permisos varios de Planeación Municipal, por ahora no es viable esto en Bucaramanga”, precisó.
Ventajas
• Mucho más confiable ya que las redes aéreas
• Son más estéticas, pues no están a la vista
• Son mucho más seguras
• No están expuestas a vandalismo
Desventajas
• Su alto costo de inversión inicial.
• Se dificulta la localización de fallas.
• El mantenimiento es más complicado y reparaciones más demoradas.
• Están expuestas a la humedad y a la acción de los roedores.
Fuente: Redes de Distribución de Energía, Universidad Nacional de Colombia, Samuel Ramírez Castaño.