Amordazaron y robaron a familia de Terrazas
El 30 de agosto, mientras la ciudad fijaba su atención en cómo salir bien librado en las calles de la ciudad por las marchas que se protagonizaban en el marco del paro nacional agrario, un grupo de siete hombres armados aprovechó la distracción para irrumpir, amordazar y robar una vivienda del barrio Terrazas.
Con la cara descubierta y con armas de varios tamaños los sujetos aprovecharon que las puertas del garaje de la casa estaban abiertas pues tendrían allí una piñata.
Eran las 3 p. m. cuando empezó la angustia para la familia que por razones de seguridad prefiere no publicar su nombre.
Dos personas de la tercera edad, siete niños, tres adultos y las dos empleadas del servicio estuvieron retenidas en el segundo piso de la casa mientras los delincuentes revolcaban todo para llevarse las cosas de valor.
“Se llevaron dinero en efectivo que había en una caja fuerte y nos quitaron todo el efectivo que teníamos a la mano, joyas, celulares y tan descarados que hasta los aretes de oro de niña de dos años se los quitaron”, manifestó una de las víctumas.
Luego de 40 minutos de zozobra la banda se marchó. Algunos vecinos dicen que los vieron salir, que cinco hombres se subieron a un Chévrolet Corsa blanco con vidrios polarizados y que los otros dos se fueron en una motocicleta. Sin embargo las víctimas saben que no actuaron solos pues mientras estaban adentro apuntándoles con armas, recibían por celular instrucciones de alguien que afuera les avisaba de algún movimiento ‘sospechoso’ de vecinos o policías.
“No es la primera vez que ocurre esto en Terrazas y La Floresta, muchas veces ha pasado y nadie dice nada, todos se quedan callados y lo peor, no se hace nada por aumentar la seguridad, por controlar estos carros con vidrios oscuros y vigilar a quienes tienen armas en sus manos”, señaló.
Aunque luego del suceso llegaron agentes del CAI Terrazas, ya nada se podía hacer. La familia afectada decidió no poner la denuncia por miedo a represalias por parte de la banda delincuencial, pues además esta pareja de abuelos vive sola.
Quedan sin embargo varias hechos que llaman la atención, como por ejemplo, que curiosamente a partir de ese día la empleada de servicio no volvió a su trabajo y que lamentablemente en el momento del robo no pasó por la cuadra el vigilante del barrio.
Y también se preguntan los afectados ¿Quién responde por las secuelas de este tormentoso episodio, sobre todo en el caso de una de las niñas, que tiene 2 años y que desde ese día se despierta llorando, en las noches, preguntando por su mamá?