Una década trabajando de ‘corazón’
El segundo piso de la Clínica Bucaramanga fue el lugar elegido para que el Instituto del Corazón de Bucaramanga arrancara labores.
Esta iniciativa fue el resultado visionario de un grupo de médicos cardiólogos que sintieron la necesidad de crear una entidad que se especializara en la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardiovasculares.
Las actividades, que se iniciaron el 5 de agosto de 2003, hoy han dado pasos gigantes en busca de su desarrollo, entre ellos las alianzas estratégicas con las clínicas Materno Infantil San Luis, la Foscal y la Clínica Chicamocha.
Asímismo su próximo eje de expansión será el proyecto Fosunab, zona franca de salud, que brindará atención a pacientes nacionales y extranjeros y a donde trasladarán su sede principal.
“Este nuevo año de vida nos llena de felicidad y nos motiva a seguir adelante, trabajando con más amor y dedicación y solidificando nuestras bases en el respeto, la humanización, solidaridad y sostenibilidad, valores que nos han dado un espacio muy importante en la vida y en el corazón de cada uno de nuestros pacientes”, expresó el cardiólogo hemodinamista Héctor Julio Hernández, jefe de Hemodinamia y uno de los socios fundadores de la entidad.
Además de este profesional, el instituto contó para su fundación con el conocimiento de otros médicos, entre ellos los médicos ecocardiografistas Hedilberto Duarte Hernández, director médico, y Guillermo Hernández Silva coordinador de la sede en la Foscal; Edgar Javier Manrique Botía, anestesiólogo cardiovascular y jefe de Anestesia y Cirugía; los médicos cardiólogos pediatras Francisco Manrique Rincón, jefe de Imágenes Diagnósticas, y Oscar Manuel Fernández Gómez, jefe de Cardiología Pediátrica; y Rafael Antonio González Niño, cardiólogo hemodinamista, subgerente y coordinador de la sede en Bogotá.