Cabecera no aguanta tanto ruido
El paso constante de buses, motos y automóviles genera bastante ruido en la carrera 33 con calle 56. (Foto Tatiana Celis).
El afán por llegar rápido, el desespero de los trancones y la falta de mantenimiento de vehículos son las razones que hoy tienen sordos a muchos residentes y transeúntes de Cabecera.
Esa fue una de las conclusiones del Plan de Ruidos del área metropolitana de Bucaramanga realizado por la Corporación para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, CDMB y que hace parte del programa Cómo Vamos.
En este se ubicaron 104 puntos representativos de la zona para realizar el mapa de ruidos, en unas pruebas hechas entre julio y septiembre de 2011, entre la avenida La Rosita y calle 36 hasta la calle 56 y desde la carrera 27 hasta la carrera 36.
Esto fue lo que se encontró.
Los 5 más ruidosos de día
- El primer lugar se lo lleva la carrera 39 con calle 49, donde el promedio de ruido en el día es de 91,1 decibeles y en la noche de 73,1
- El segundo puesto es para la calle 56 con carrera 33. Allí el ruido llega a los 80,2 decibeles en el día y en la noche a los 74,3.
- La calle 48 con carrera 27 A ocupa el tercer lugar con 79,9 decibeles de día y 79,7 de noche, casi el mismo nivel de ruido las 24 horas del día.
- El ruido de la calle 54 con carrera 27 llega en el día a los 78,6 decibeles y en la noche a 71,2, ubicando este punto en el cuarto puesto.
- El quinto lugar se lo lleva la calle 56 con carrera 27. El ruido en este punto es de 78,6 decibeles en el día y en la noche de 75,4.
El más trasnochador
El punto más ruidoso fue la calle 48 con carrera 36, llegando a los 81,5 decibeles. Estas pruebas se hicieron de lunes a viernes de 9 p. m. a 7 a. m.
El menos ruidoso
Calle 54 con carrera 35A, con 62,8 decibeles en el día (de lunes a domingo entre 7 a. m. y 98 p. m.) y 54,2 en la noche.
El ruido en algunos puntos de Cabecera es cada vez más insoportable.
Así se oye carrera 33 con 56
Uno de los sitios con mayor flujo vehicular es la carrera 33 con calle 56. Los frenos y el acelerador de los carros y motos contaminan auditivamente este punto. Gente de Cabecera hizo un conteo y durante un minuto vio el paso de estos objetos ruidosos: una volqueta, una sirena o alarma de un taxi encendido (mientras cambiaba el semáforo), camionetas diesel y el arranque de los buses.
Además, durante otro minuto se contabilizó el paso de 33 motos, algunas de ellas con motor ‘dos tiempos’, que además de generar más ruido, también contaminan más el medio ambiente.
El punto es paso también de buses de las empresas de transporte de Lusitania, Cotrander, Transpiedecuesta, Unitransa y Metrolínea.
También se debe tener en cuenta que cerca a esta zona están las Clínicas Bucaramanga y Metropolitana, a donde llegan y de donde salen ambulancias.
Los corredores viales principales (carrera 27 desde la calle 40 hasta la calle 56, excepto en la calle 51, y la carrera 33 desde la calle 45 hasta la calle 56), son los sectores con afectación significativa por ruido ambiental, ya que sus registros presentan datos entre los 75 y 80 decibles.
Con 69 puntos se superan los decibeles que soporta el ser humano durante determinado tiempo.
Soluciones posibles
El estudio Cómo Vamos sugirió algunas medidas correctivas frente a esta problemática, algunas de ellas son:
– Crear bahías por la carrera 33 de Cabecera con el espacio necesario para las paradas de los buses de servicio urbano, con el objeto de evitar la obstrucción del paso de las fuentes móviles, lo que trae como consecuencia la inadecuada utilización de las bocinas de conductores impacientes.
– Para las fuentes fijas de ruido (establecimientos comerciales) instalar sistemas de control de ruido en la fuente y en el medio transmisor (utilización de cabinas, paredes dobles, materiales absorbentes y reflectivos, barreras totales y parciales, etc)
– Incrementar, por parte de la Autoridad Ambiental, los operativos en campo a las fuentes móviles para sancionar la instalación de elementos generadores de ruido como resonadores y pitos no autorizados.
– Aplicación de campañas de “no utilización del pito” y de “equipos de amplificación (altavoces)”.
– Enseñar a los usuarios y conductores de buses a utilizar solamente las “paradas” de buses autorizadas, ya que actualmente se detienen en medio de la vía o en cualquier parte de esta, colocando en peligro la integridad del ciudadano y causando “trancones” y utilización inadecuada de pitos y bocinas.
Y ni qué decir de la transversal oriental. Vivo en Balcones de la Colina y cada vez es más desesperante el ruido de los carros y motos que suben del semáforo que viene de Floridablanca o de El Campanazo. Pero los peores de todos son los buses viejos y que dejan el humo negro por donde pasan, son los más ruidosos del mundo. Yo creo que si hubiesen puesto un aparato de esos en el conjunto hubiera sido el punto más ruidoso de Bucaramanga. Es invivible esa torre 4 de balcones.