Mario Zafra y su atracción por las fiestas populares
Desde muy pequeño Mario Hernando Zafra Bueno supo que sería fotógrafo. Pero solo hasta que estudió Diseño Gráfico en la Universidad Jorge Tadeo Lozano, en 1971, supo que lo suyo eran los carnavales.
Entonces entendió que su vida giraría en torno a los viajes por todo el país, por eso desde hace más de 10 años pasa su vida de pueblo en pueblo tomando fotografías.
Aunque nació en Bucaramanga, se graduó bachiller del colegio San José Provincial de Pamplona.
Allí, en medio de la historia y la arquitectura que guarda en sus entrañas el Museo Anzoátegui y la Casa de las Marías, entre otros sitios, dio sus primeros pasos con la fotografía antropológica, prácticas que le sirvieron más adelante para estudiar también Antropología en la Universidad de Los Andes, en Bogotá.
Mario es un aventurero y lo dicen no solo su tono de voz y sus narraciones orales, sino su vasto registro fotográfico que conserva en su apartamento.
Las expresiones culturales populares son el tema predilecto de este santandereano.
En estas imágenes está la constancia de su trabajo y obviamente del placer que le producen los colores, las fiestas tradicionales y el jolgorio que esto lleva.
Ha recorrido todos los municipios de Santander capturando rostros, arquitectura y expresiones artísticas y culturales innatas de cada región.
Por eso desde ya prepara ‘Carnavales y Fiestas de Santander’, una exposición fotográfica en el Museo de Arte Moderno de Bucaramanga, MAMB, programada para el próximo año.
En ella Mario mostrará a los bumangueses las riquezas culturales y patrimoniales que tienen los pueblos del departamento.
“Estoy guardando todo mi material físico en digital porque tengo pensado ir el próximo año al Ministerio de Cultura para gestionar una muestra de la historia artística y popular que he visto en Colombia con mis recorridos. En ellos tengo muchos rostros porque creo que con cada uno, en los distintos carnavales, se identifican regiones del país, pues los rasgos étnicos son bellísimos para cada uno”, manifestó Mario Zafra, quien también se desempeñó como docente en la UIS y en la UDI.
Impactado por el color
La arquitectura y la historia que hay detrás de ella, también lo inspiran a la hora de hacer fotografía.
En un diálogo con este reconocido fotógrafo es inevitable escucharle su experiencia en el Carnaval del Diablo, en Riosucio, Caldas, que se realiza en los primeros días de enero, cada dos años.
Precisamente en enero pasado estuvo allí capturando la arquitectura del pueblo similar a la de las viviendas del oriente antioqueño y decoradas en su mayoría por el artista Eliseo Tangarife.
Con su lente pudo traer para su archivo personal los chilindrines, rostros, cachos de diablos, máscaras y muchos rostros representativos de esta fiesta.
Este problema se puede solucionar preventivamente, facilmente, ya que hoy esxiste un producto especializado ne proteger estructuras metálicas hasta por dos años, sin necesidad de mantenimiento, aún en ambientes salinos y alta humedad.
Mas información,