Invertir en lo verdaderamente importante
No entiendo porqué los gobiernos se dedican a invertir miles y millones de pesos en asuntos poco importantes y dejan por fuera de cualquier presupuesto a la cultura, los jóvenes y los niños.
En nuestro medio la realización de eventos culturales va casi siempre ligada al esfuerzo de verdaderos quijotes que tienen que pedir aquí y allá para poder sacar adelante sus proyectos.
Mientras tanto, en el seno de las administraciones se despilfarran dinerales en congraciarse con cuotas políticas o amigos personales y en celebraciones que nada aportan al desarrollo de la ciudad.
Lo mismo sucede con la atención a la juventud y la niñez.
¿Qué tipo de eventos o actividades hay para ellos?
Uno de los pilares de una buena sociedad está en la formación que se les dé a los niños y en nuestro entorno es muy escaso el trabajo que se hace con ellos.
Algunos mandatarios han creído que ayudar a la niñez es darles una mogolla, pero pocos le dedican esfuerzos y presupuesto a algo vital como es la formación integral.
No hay espacios para ellos. Los parques se perdieron, las actividades son nulas, las propuestas naufragan.
Muchos de los jóvenes de nuestra ciudad no encuentran otra distracción que reunirse con amigos a tomar. Y en buena parte esta actitud está soportada en que la ciudad no ofrece atractivos para ellos.