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Periodista del Barrio

Así se constituyó el parque Leones

El periódico Gente de Cabecera en su edición del 6 al 13 de agosto de 2010, con fotografías demostró  que al parque se lo estaba comiendo la maleza y que lo único visible dentro del parque era un automóvil abandonado desde hacía varios meses.

En la edición del 18 al 25 de marzo de 2011, dijo «El parque sigue igual». Sería provechoso recordar cómo fue que se constituyó este parque para tener idea de lo que se está perdiendo y de lo que se debe hacer para salvarlo.

Tableros rotos, inseguridad y el pasto crecido.

Las bancas tampoco se salvan de la delincuencia .

Ni que decir de estos palos de guadua.

Pues aunque la construcción y mantenimiento de los parques le corresponde a los municipios en su totalidad, los vecinos también  conjuntamente con las alcaldías, pueden encargarse de construir infraestructura, adecuarlos de acuerdo a las necesidades de los residentes y mantenerlos en condiciones óptimas para la recreación pasiva y activa de niños, jóvenes y adultos mayores.

Su nacimiento fue asi

En 1951 la Urbanizadora David Puyana S.A. le cedió al Municipio de Bucaramanga el lote de terreno ubicado en la calle 41 entre carreras 38 y 39 para que construyera un parque de recreación activa y pasiva.

Desde 1951 hasta 1986 ese lote permaneció totalmente abandonado, situación que aprovecharon unos concejales para cederle en comodato a 99 años a una entidad privada ese terreno, para que construyera una universidad.

Por solicitud de las Juntas de Acción Comunal de Las Américas y Cabecera del Llano, el alcalde Carlos Virviescas Pinzón devolvió el acuerdo al Concejo argumentando que ese lote lo había cedido Urbanas para construir un parque y no una universidad privada.

Para evitar otro ‘raponazo’ del Concejo o una invasión, la Administración del Municipio construyó graderías y lo inauguró con el nombre de parque de la Constitución Nacional.

Posteriormente el exalcalde Alberto Montoya Puyana lo reinauguró con el nombre de parque Los Leones y firmó un acuerdo con el Club Los Leones para adecuación y mantenimiento.

Ese convenio duro hasta cuando el doctor Montoya terminó su mandato. Los posteriores alcaldes lo han mantenido totalmente abandonado, convertido en botadero de escombros y basuras, ocupado por «drogadictos que le niegan a los vecinos la posibilidad de disfrutar de esa zona común». Si ese predio continúa totalmente abandonado no sería raro que el Concejo pretendiera nuevamente cederlo en comodato o expuesto a una invasión.

 

Miguel Jaimes

Periodista del Barrio.



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