Una Navidad en familia
Laureano Gómez Serrano y familia
Llevan 14 años asistiendo a la parroquia Cristo Misionero. Allí por supuesto han estado en la novena de Aguinaldo de este año. Son Laureano Gómez Serrano, su esposa Teresa Chacón de Gómez y sus hijos Diana Rocío, Laura Cristina y Andrés Felipe, una familia cien por ciento santandereana y con raíces netamente cristianas. Como muchos católicos, además de compartir espacios entre sí, creen que la Navidad es un sentir el acercamiento espiritual al nacimiento de Jesús, que es principio y fin, la alegría y la felicidad. “Hay gente que no comprende el sentido de la preparación de las novenas. Durante toda la novena muchos van a misa y la noche de Navidad se olvidan de lo más importante y ponen de protagonistas otros factores como el licor”, dijeron sobre la importancia de esta fecha.
Para esta ocasión, la familia Gómez Chacón irá a la misa de Nochebuena, luego bendecirán el pan y el vino compartirán en familia. Seguidamente estarán compartiendo una cena y luego visitarán a sus demás familiares. “Si hay oportunidad bailamos, pero no es lo principal”, comentaron los integrantes del Movimiento Familiar Cristiano, residentes en Santa Bárbara I. Al cumplir 33 años de vida matrimonial, este ceno familiar le inculca a sus hijos la importancia de la fecha, que esperan se conserve por muchas generaciones más.
Jorge Estupiñán y familia
La tradición de rezar la novena de Aguinaldos a las 8 p. m. frente al pesebre no se ha perdido y se espera perdure por siempre para la familia de Jorge Estupiñán. Casado con Janet Rincón Prada, este ministro de la palabra en la parroquia Cristo Misionero celebra con su familia la llegada del Niño Jesús. “Asistimos como a cuatro novenas al día, la de la madrugada, luego vamos al asilo San Antonio a donde llevamos ofrendas, luego hacemos otra en conjunto y en la casa”, Aunque viven solos, la llegada de esta época les alegra la vida, no solo por lo que significa como cristianos, sino por la visita de su hijo quien reside en Bogotá.
“Casi todos los 24 y 31 hacemos lo mismo, vamos a la misa, compartimos una cena, entregamos regalos y visitamos familiares. Al día siguiente también vamos a los oficios religiosos”, expresó el vecino de Bulevar del Cacique.
Martín Cuevas y familia
Acompañado de su esposa Rosa Balbuena, Martín Cuevas madruga siempre a toda la novena de Aguinaldos, pues es un tiempo de preparación para la llegada del Niño Dios. “La Navidad es un revivir del nacimiento de Jesús, es una fecha que se debe celebrar todos los años”, dijo sobre el significado de esta fecha. Para esta temporada, esta familia católica se olvida de paseos a la playa y fiestas, pues su primera obligación es asistir a los encuentros religiosos de la época, “la rumba pasa a un segundo y tercer plano”. Como laico comprometido, cree que hace falta más temor de Dios frente a estas celebraciones religiosas, pues ahora son dedicadas al licor y a las fiestas.
Este asesor de seguros, tiene más de 15 años de asistir a la parroquia San Pío, eso sí, acompañado de sus hijos Ludwin y Henry, quienes viven en la ciudad. “El 24 de diciembre en la noche vamos a los oficios religiosos, luego nos reunimos en la casas, compartimos una cena, charlamos y pasamos un rato agradable”, dijo sobre la Nochebuena.
También se destacan…
Es de destacar también la labor de muchos laicos que entregan sus vacaciones, en familia, al servicio de su parroquia a propósito de esta celebración. En San Pío se destacan Antonio Franco y su esposa María del Pilar Moreno, Efraín Ardila y Beatriz de Ardila, Juan José Lizcano y su familia; en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús a Juan José Saavedra y familia; en Cristo misionero a Rito Rodríguez y Ella Martínez, y a Juan de Jesús Galvis y familia.