Pensando en los inconvenientes que han surgido en varias ciudades del país con el uso y funcionamiento de las escaleras eléctricas, Alfredo Gallego Rojas quiso pensar en una forma de educar a la ciudadanía al respecto.

Por eso, como administrador de una agencia de marca de ascensores en Bucaramanga y Floridablanca, quiso empezar por los centros comerciales, donde hay mayor flujo de personas.

Un equipo de mimos, con señalización e indicando lo que se debe hacer y no hacer cuando se usan estas escaleras, hacen parte de la campaña en la ciudad.

“Vemos con asombro cómo todavía a pesar de las recomendaciones la gente corre, suben distraídos, se recuestan, suben y bajan coches con bebés y en el peor de los casos, dejan a los niños jugar en las escaleras”, dijo Gallego.

Las actividades han tenido gran aceptación entre los usuarios, pues entienden que se está velando por su integridad física y que en un alto porcentaje los accidentes ocurren por la imprudencia de las personas.