En lugar de estar seguros haciendo deporte y actividades físicas, muchos adultos mayores que frecuentan el parque la Flora se enfrentan a situaciones contrarias. la falta de bombillas en varios puntos del parque es evidente, tanto que sumando las faltantes es casi medio parque el perjudicado. esto ha perjudicado las actividades deportivas de quienes a diario llegan al sitio, pues los caminantes se tienen que restringir de caminar por ciertas partes.

Uno no sabe qué animal le salga, no sabe qué terreno se está pisando o qué persona le salga por ahí a hacer daño. entonces no tenemos otra opción que llevar una linterna o esperar a que salga totalmente el sol para salir a hacer deporte.