Roberto Orduz Serrano: Hacedor de historia con fotografías
Desde el barrio El Jardín Roberto Orduz Serrano da rienda suelta a todo el sentido artístico de la fotografía. Y es que su interés por plasmar a través de la imagen diferentes detalles de la ciudad y la región se ha convertido en toda una pasión que hoy puede ser palpable en la gran cantidad de imágenes que ha capturado.
Este no es un gusto reciente. Por el contrario, data de sus años de juventud. En esa época encontraba en la fotografía un hobbie, que podía ser satisfecho gracias a sus continuos cambios de ciudad de residencia. Sus primeros trabajos fueron más familiares y de tipo biográfico.
Nació en Bucaramanga, pero por el traslado continuo de su padre por motivos laborales, residió en Pasto, Mocoa, Popayán, Ibagué, Cúcuta y Cartagena. Esto le ayudó a tener un sentido más amplio del país y de todas las costumbres e idiosincrasia. Su interés por registrar el recorrido histórico y los diferentes cambios que ha sufrido la ciudad durante estos años han sido su gran motivación.
Sin embargo, la fotografía no fue su profesión. Se formó en derecho en la Universidad Autónoma de Bucaramanga, fue de la primera promoción. Según dijo, “las condiciones de esa época no dieron la oportunidad de mirar hacia la fotografía.
Nunca pensé en ponerme a profundizar. Sí leí mucho y comentamos con muchos amigos la fotografía y las condiciones que se requieren para tener gusto en la selecció0n del material”. Como profesional del derecho ejerció en instrucción criminal y durante varios años en los juzgados, también como fiscal encargado del Juzgado Sexto Superior.
Roberto Orduz nos contó que durante su paso por instrucción criminal tuvo que viajar por muchos pueblos de Santander, en donde realizó varias fotografías. De estos pueblos siempre se interesó por captar la iglesia, el limosnero, el bobo del pueblo y si los había los cotudos. Ellos de alguna manera eran testimonio de los lugares y del desarrollo de la región. Aún con todas estas experiencias su gran trabajo ha estado en Bucaramanga.
Él es de esas personas interesadas en dejar testimonio de los cambios que ha sufrido la ciudad. “Me incliné por la práctica arquitectónica y más adelante me dediqué mucho a fotografiar rincones de Bucaramanga, para hacer fotografía comparativa de lo que dejó Quintilio Gavassa. Con base en la fotografía antigua he ido armando mi archivo para plasmar la transformación que ha sufrido Bucaramanga”.
Lo importante de estas fotografías, para él, está en que conserven el mismo ángulo del que fueron tomadas por primera vez. Sobre esto Orduz indicó que muchas joyas arquitectónicas de la ciudad han desaparecido por el paso del progreso y los nuevos proyectos de concreto. Antes de que esto ocurra capta la imagen para guardar archivo de lo que allí existió. Después, cuando ha sido reemplazada por un nuevo edificio, hace otra fotografía, para dejar un legado. Las imágenes de don Roberto hacen parte de las expuestas en la Cátedra Armando Puyana, por donde han pasado y pasarán unas 200 diapositivas de la ciudad.
Excelente labor, esa es una de mis pasiones la fotografía urbana, ya he realizado varias tomas desde la transformación de la ciudad desde el inicio de Metrolinea. En 50 años, espero exponer las fotos… que para la fecha ya habrá recobrado importancia… Felicitaciones Maestro!!!