¿Qué pasó con las obras de alcantarillado de la carrera 40?

Tras el hundimiento ocurrido sobre la carrera 40 con calle 46, el pasado 7 de mayo, la Empresa Pública de Alcantarillado de Santander, Empas, anunció la renovación de 120 metros lineales y domiciliarios correspondientes a las redes de alcantarillado de ese sector de Bucaramanga.

Cinco meses después de iniciados los trabajos, la entidad informó que la obra estaría lista en los próximos días, cumpliendo así con el tiempo planeado en un principio para el reemplazo de las antiguas tuberías de concreto por unas nuevas fabricadas en PVC estructural, que aseguran una vida útil de al menos 70 años.

Al respecto el ingeniero Ervin Flórez, asesor de Operaciones de Infraestructura de la Empas, informó que en la actualidad se trabaja en la parte final de la obra que ya registra un avance superior al 95%.

“Los trabajos están casi listos. Las obras correspondientes a la reposición de las redes ya terminaron, lo que estamos haciendo en este momento es el replanteo del terreno para proceder con las obras de pavimentación y adecuación de andenes de la carrera 40”, explicó.

Del mismo modo, Flórez informó que el cambio de las acometidas domiciliaras fue realizado por personal del Empas, debido al alto grado de complejidad que representaban los trabajos.

Para realizar los cambios los residentes del sector tenían dos opciones: que la Empas realizara la renovación y el pago del arreglo se hiciera mediante la factura del servicio hasta en 36 meses, o que el propietario hiciera el cambio con personal de confianza a la par con la renovación de la red principal.

“Después de conversar con la comunidad se llegó al acuerdo para que funcionarios de la Empas hicieran el reemplazo de las acometidas, debido a la profundidad de las excavaciones y complejidad de la obra.

“Asimismo, se fijó con cada uno de ellos el plan de financiamiento de la obra de acuerdo con lo contemplado en la Ley 142 de Servicios Públicos”, agregó el Ingeniero Ervin Flórez.

Con esta obra se contrarresta la obselescencia de las redes de saneamiento básico de esta zona de Cabecera, que se vio reflejada en dos hundimientos viales registrados en meses anteriores.