Taxis y orden en la ciudad
Editor Gente de Cabecera ([email protected])
Los taxistas son un gremio importante en la ciudad que no sólo presta un gran servicio, sino que se convierte en muchas ocasiones en la primera imagen del área metropolitana.
Además, de su actitud cívica depende que la movilidad funcione o se estanque.
Por eso es hora de hacer un trabajo intenso con este grupo humano para que se cambien algunas conductas que rayan en lo absurdo.
Por ejemplo, no se justifica bajo ninguna circunstancia lo que ocurre en las afueras de los centros comerciales, donde se ubican largas filas de carros amarillos en espera de pasajeros, pero a costa de la generación de trancones y embotellamientos en una ciudad ahogada por su tráfico.
Casos como el de Megamall, Cacique y Parque Caracolí no se pueden seguir admitiendo. En los dos primeros la ocupación del espacio por parte de los taxistas cercena de un tajo la capacidad de las importantes vías donde están ubicados, con el agravante de la posibilidad clara de accidentes tanto para conductores como para peatones.
En el caso de Parque Caracolí la situación raya en lo ridículo, ya que la administración del centro comer-cial dispuso de unos conos en su bahía de acceso para evitar que los taxis se estacionaran allí, pero los conductores muy orondos se ubican por los costados de los conos burlando la disposición.
Es hora de asumir compromisos: que la Dirección de Tránsito imponga su autoridad y sancione semejante despropósito, que las empresas de taxis capaciten a su personal, que los centros comerciales promocionen más sus zonas internas de taxis y que los usuarios hagamos uso de estos espacios que nos brindan mayor seguridad, en vez de seguir tomando el taxi en la calle que no nos da garantía y en cambio, genera una congestión sin par en la ciudad.