Devoción innata por el pesebre
Gladis Teresa Peña acompañada de sus sobrinos Carlos Alejandro, Carlos Julián, Luis Andrés y Pablo, un amiguito de la casa.
Aunque Cecilia, Jorge y Gladys Teresa Peña son hermanos y viven juntos, es Gladys quien año tras año le dedica buena parte de su tiempo a armar el pesebre.
“Desde que estamos pequeños no ha pasado un solo año sin dejar de hacer el pesebre y más que una costumbre es una devoción inculcada por nuestra querida mamá Teresita. Ella con su ejemplo nos enseñó el verdadero significado de esta fiesta religiosa y el sentido que debemos darle como católicos”, dijo Gladys, quien para el día de la Inmaculada Concepción lo tuvo listo.
Esta obra se puede considerar como artística pues posee detalles originales. También tiene facetas clásicas que se nota por la delicadeza salida de sus manos y de su creatividad.
El nacimiento, uno de los espacios más importantes del pesebre.
El pesebre tiene 42 figuras de marca española y los demás elementos como el cielo, el portal del nacimiento, el pueblito de Belén y el portal de donde salen las ovejas con el pastor son elaboradas por ella quien usó materiales como cartulina prisma, balsa, cartón paja, icopor, papel de azúcar, papel y colbón mezclados para lograr texturas, óleo, acrílicos y acuarela.
Obvio no puede faltar el toque de la naturaleza, digno espacio de la época y que en este caso se representa con el agua y las matas naturales.