¿Quién da los permisos?
Caliente y candente estuvo el debate esta semana en el Concejo de Bucaramanga en torno a los permisos que se otorgan a ciertos negocios nocturnos de la ciudad.
Durante la plenaria se dijeron cosas como que algunos funcionarios estarían recibiendo dádivas a cambio de permitir el funcionamiento de algunos mal llamados clubes.
También quedó planteada la duda de quién da los permisos, pues si bien se supone que deben ser las alcaldías las encargadas de estas licencias, parece que hay intereses de otros lados para que ciertos negocios gocen de total tranquilidad.
Y claro aquí surgió el tema de las famosos ‘barra dance’, clubes y negocios donde se comercializa licor y se presentan espectáculos que vinculan mujeres semidesnudas, sin que nadie haya podido poner control.
El tema toca tanto a la comunidad de Cabecera como de Cañaveral, ya que allí operan establecimientos con estas características que se han convertido en el ‘coco’ de las administraciones.
Las quejas de la comunidad son reiteradas por el tipo de negocio que se ha ido encubando en sus barrios y que con el tiempo terminan convirtiéndose en una mala imagen.
¿Será que por fin el POT le pondrá orden a esta situación?
Nadie está en contra del derecho al trabajo que tienen muchas personas, pero por el bien de la ciudad no se puede seguir permitiendo que al lado de una panadería o de centros comerciales de reconocida reputación y de casas de familia funcionen lugares donde lo que se fomenta es la prostitución y los vicios.